Una nueva aventura por Marruecos, está vez con un solo acompañante mi mochila y yo,...
Que intensa curiosidad albergaba mi mente antes de llegar, el avión tomo suelo y todos aplaudimos estabamos en Féz la inmensa y famosa Féz de los Alauítas, de los Mereníes, de los Almohávides... Judíos, Moros y Cristianos han dejado su huella en ella.
Descubrir Féz creo que debe ser uno de los puntos que se deben de agregar a la lista de cosas por hacer antes de morir, Féz es una ciudad milenaria, historica e impactante, un ataque a los sentidos, un viaje al pasado, una invitación a lo desconocido, al atravesar Bab Boujloud la gran hermosa puerta azul de entrada a la medina la impresión me embargó tal cuál niño ante lo desconocido.
Un retroceso en la máquina del tiempo, y es que la medina de féz es hoy en día la medina medieval más grande y antigua del mundo y su extensión urbana la más extensa, por eso mismo es Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1981, se cree que fue la mayor ciudad del mundo entre 1170 y 1180.
Las dos calles principales por las que discurren miles de personas al día te invitan a la indecisión pero una véz hecha la elección el ataque a los sentidos se hace más intenso tanto en una como en la otra, mil olores que oler, mil cosas que ver y mil cosas que sentir,... Los olores a especias, carnes, animales, fragancias, vegetales, comidas y mucho más.
Los asnos se cruzan en tú camino cargados de diversas mercancías, cueros, bombonas de gas, cajas de refrescos, especias, alfombras y muchas cosas mas. Mil miradas que se cruzan ante ti, gestos y sonidos, pero sobre todo lo mejor que puedo destacar es la hospitalidad fasí, muchos fasíes te dan la bienvenida a Marruecos y te brindan su hospitalidad en está ciudad que siempre se ha carácterizado por ello.
Lo importante y la verdadera aventura de la medina de Féz radica en el dejarse perder en su laberinto, descubrir las mil y un callejuelas que te llevaran a lugares tan diversos que alucinaras, desde el zoco de los artesanos, la plaza Nejarinne, la Mezquita de los andaluces, las curtidurias, el zoco de la Hena, el de los artesanos, los metaleros, sus mézquitas y hermosas puertas y hasta sus secretos mejor guardados como la puerta de Al Andaluz, la puerta más hermosa que he podido ver en toda mi vida que te invita a la imaginación.
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